SUPERHÉROES.

  

MUNDO DE VILLANOS

Es un hecho que Batman, Superman, Iron Man, y cualquier superhéroe no hubieran llegado a ser quién es, si no fuera por su némesis. Los villanos hacen parte fundamental de los comics. Sin Lex Luthor Superman no podría existir, sin el Guasón Batman no sería el gran héroe que es. Deben existir los villanos que elaboren planes macabros, para poner en jaque al superhéroe y este pueda sacar  lo mejor de su repertorio para detenerlos.

   Bien dicen que no hay luz sin oscuridad, bien sin mal. Eso genera lo que es el equilibrio universal, para que algo subsista debe existir su contrario. No hay amor sin odio, paz sin guerra. A esta premisa universal se acoge la lógica del héroe. Superman tan solo sería un extraterrestre que se dedica al periodismo si no tuviera que enfrentarse a villanos feroces, Iron Man sería un millonario, con una mente brillante, dedicado a hacer crecer su empresa. Ninguno seria lo que es, sin un villano al cual derrotar.

   Cada villano adoptó un perfil psicológico, influenciados por sed de venganza, dominación, destruir e incluso simple placer. Cada villano es impulsado por algún objetivo. Su perseverancia y su convicción los transforman en seres despiadados y poderosos. Y los principales afectados son los ciudadanos, indefensos y desprotegidos. Es así como llega el momento del héroe. Se puede decir que los villanos al causar temor y desesperación en la población generaron la creación de los superhéroes.

   La personalidad altruista de los héroes, esa facultad única de entregar todo por el bien de los demás sin esperar nada a cambio, permite que se enfrenten a cualquier peligro, sin importar cuál sea, y que esto represente un peligro de muerte para ellos. Y hay que decir que esa postura adoptada por los defensores, genera en los villanos placer. Saben que por más perverso que se vea su plan, el héroe los va a enfrentar, sin importar las consecuencias. Es la circunstancia favorita para todo villano.

   La adversidad es la fuente que permite en cada ser humano sacar lo mejor de sí. Digamos que nosotros de alguna manera necesitamos enfrentarnos a villanos, para explotar la grandeza que hay dentro de nosotros. Necesitamos la adversidad para crecer y madurar. Tal vez la fantasía de los cómics  se acerca más a la realidad, cuando aprendemos a luchar contra toda adversidad, como verdaderos héroes.